Wednesday, 25 de August de 2010
El acuerdo 043 del 21-DIC/2005 suscrito por el Consejo Superior de Salud de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional adopto las políticas en materia de Salud Sexual y Reproductiva para la Fuerza Pública y en cumplimiento en dicha política se vienen desarrollando una serie de estrategias que buscan fortalecer los Programas de Promoción y Prevención al interior de los Establecimientos de Sanidad Militar. Dentro del Programa de Salud Sexual y Reproductiva se trabaja la Línea de Acción de Violencias (intrafamiliar, de género y sexual).
La violencia es un comportamiento, que provoca, o puede provocar, daños físicos o psicológicos a otros seres, y se asocia, aunque no necesariamente, con la agresión física, debido a que también puede ser psicológica o emocional, a través de amenazas u ofensas. Existen varios tipos de violencia: • Violencia Intrafamiliar: también se denomina doméstica, es una práctica o ejercicio tanto de fuerza como de poder que se produce entre miembros de una misma familia, en la que una persona es la que ejerce la fuerza o agrede, y otra u otras personas son las que resultan agredidas. Se caracteriza porque los abusivos se presentan de forma permanente o cíclica y puede causar al agredido la muerte, daño o sufrimiento físico, sexual, psíquico o cualquier tipo de daño. Se entiende por familia a las personas que tienen una relación de parentesco, por vínculo sanguíneos, por motivos de adopción o por afinidad. Esta se forma por medio de la unión consensual o a través del matrimonio. Dentro de la violencia intrafamiliar se encuentran: el maltrato infantil, la violencia conyugal , la violencia hacia el adulto mayor y la violencia hacia los discapacitados, entendida esta última como todo acto que por acción u omisión provoca daño físico o psicológico a personas que padecen temporal o permanentemente una disminución en sus facultades físicas, mentales o sensoriales, por parte de los miembros de la familia o de cuidadores que aunque externos a la familia deben ser supervisados por ella. • Violencia de género: el género hace referencia a las diferencias psicológicas, sociales y culturales entre hombres y mujeres, siendo estas últimas las que producen, motivan o causan la desigualdad en las relaciones entre los hombres y las mujeres, la distribución y ejercicio del poder. Este tipo puede afectar tanto a mujeres como a hombres, aunque es más usual la primera. La violencia contra la mujer significa todo acto, omisión, amenaza o control que ejerce contra la mujer en todas las esferas y cuyos resultados pueden reflejarse en daños físicos, psicológicos, sexuales, intelectuales o patrimoniales. • Violencia Sexual: abarca el sexo bajo coacción de cualquier tipo, incluyendo el uso de la fuerza física, las tentativas de obtener sexo bajo coacción, la agresión mediante órganos sexuales, el acoso sexual incluyendo la humillación sexual, el matrimonio o cohabitación forzados incluyendo el matrimonio en menores, la prostitución forzada y comercialización de mujeres, el aborto forzado, la denegación del derecho a hacer uso de la anticoncepción o a adoptar medidas de protección contra enfermedades y los actos de violencia que afecten a la integridad sexual de las mujeres tales como la mutilación genital femenina y las inspecciones para comprobar la virginidad. Violencia Sexual en situaciones donde se aplica el Derecho Internacional Humanitario. Los delitos que constituyen violencia sexual pueden ser, y a menudo son, cometidos con ocasión de un conflicto armado, ya sea interno o internacional y puede constituirse en crímenes de guerra o violaciones graves al derecho Internacional humanitario. Dentro de los crímenes de violencia sexual incluyen: Violación, Esclavitud Sexual, Prostitución Forzada, Embarazo Forzado y Violencia sexual y otros abusos sexuales de gravedad comparable ¿Qué hacer si soy víctima de violencia? Diríjase a su Establecimiento de Sanidad Militar más cercano, comunique en forma verbal o escrita, mediante una narración breve de cómo sucedieron los hechos, fecha y lugar. Si se conoce a los presuntos autores deberá incluir todos los datos que conozca sobre el mismo. Allí el equipo interdisciplinario tendrá el conocimiento necesario para abordar esta clase de situaciones, especialmente con servicio de psicología para hacer la primera intervención o manejo de crisis, cuando ello se requiera. Es importante recomendar también que la víctima no se lave el cuerpo y conserve y lleve las prendas de vestir u otros elementos que puedan contener fluidos o huellas de ella misma o del agresor, con el fin de facilitar la eficacia del reconocimiento sexológico que el caso amerite. Recuerde que la información que usted suministre es confidencial y se da un manejo adecuado a la misma. A las personas que han sido víctimas de una o varias experiencias de violencia, así como aquellas que generan la violencia, se les brinda la asesoría necesaria para que de manera voluntaria se inicie un tratamiento psicológico, asesorías o ayuda terapéutica. Conscientes de prestar un servicio con altos estándares de calidad y teniendo en cuenta que los casos de violencia cada día son más frecuentes, la Dirección General de Sanidad Militar en coordinación con el Fondo de Poblaciones Unidas “UNFPA”, vienen trabajando frente a esta problemática. Por tal razón y en cumplimiento al proyecto “Fortalecimiento de la Salud Sexual Reproductiva, Derechos Sexuales y Reproductivos y Equidad de Género al interior de la Fuerza Pública” suscrito entre el UNFPA y el Ministerio de Defensa Nacional, se está desarrollando durante el presente año unas jornadas de capacitación a nivel nacional en “Abordaje Forense de la Violencia Sexual”, la cual tiene como objetivo mejorar las competencias de los profesionales de la salud tanto de las Fuerzas Militares como de la Policía Nacional y garantizar así su preparación para la atención de cualquier tipo de violencia que se pueda presentar entre nuestros usuarios.